lunes, 12 de octubre de 2009

Aventura en Ica

En los últimos años he tenido la suerte de poder hacer varios viajes. Una amiga que tiene familia en Ica, July, nos invitó a celebrar fiestas patrias allá. Ella se adelantó saliendo un día antes y Patricia y yo partimos después. Nos íbamos a encontrar en la casa de la familia de July.

Debíamos estar Patricia y yo en el caserío de Santa Bárbara (Ica) a las 11pm dándole el alcance a July que seguramente ya iba a estar empilada (el historial familiar nos lo garantizaba absolutamente más aun si se mezcla cachina, pisco artesanal y chela, todas bebidas de dioses, pero que en conjunto podría llegar a sacar lo más oscuro de nosotros).

Luego de instalarnos en un hotel decente, esperé en mi habitación viendo televisión que Patty se termine de arreglar. Estando listos los dos, partimos a la casa de la familia materna de July. Resulta que no había dirección (yo confiaba esa información a Patty). El taxista conocía un poco la zona, y entre la oscuridad de la noche mal iluminada por algunos postes de luz medios inclinados entró la llamada al celular de July, que nos terminó de guiar para llegar a buen recaudo a la casa de la juerga. Era un poco más de la media noche y estábamos empezando cual juerga en Lima. Hacía mucho frío.

Nos presentamos con la familia de July (primos, tíos, padres, etc). Realmente en provincias a uno lo hacen sentir como en su casa, lo primero que me dieron a penas llegamos fue una botellita de plástico a medio llenar con un líquido transparente que parecía agua.
La frase mágica: “Para que se vayan poniendo al día”.
Olí el contenido de la botellita y pensé: “Mierda, es pisco”.

Sin pensarlo mucho empezamos a tomar shots con Patty, July y su familia hasta terminarlo. No íbamos a rechazar tal muestra de afecto y menos de parte de los anfitriones.
Luego me presentaron a Pilsen y Cristal (chicas muy agradables y encantadoras que sabían como tentarme) y como les digo, me sentí como en casa.
Una reunión muy auténtica y familiar.
Como olvidar la foto de mi querida July en un mural familiar en medio de la sala de la casa, con algunos añitos menos y en su vestidito de quinceañera, revelando secretos íntimos como el color y la forma real de su cabello (ahora entiendo por que tanta inversión en peluquerías). Tampoco puedo dejar de contar el acoso de uno de los tíos de July (y tío de verdad) sobre Patty. Empezó con un inocente baile y continuó con una acosadora persecución.

Entre bromas, alcohol y baile llegó a mis manos un plato de carapulca. Para mí que normalmente no tengo hambre (para nada) fue como si el mundo se pusiera en “pausa” y me concentré en degustar la deliciosa carapulca a tal punto que salí de la casa para no ser interrumpido por la música y gritos de los invitados que se encontraban en un éxtasis de alegoría envidiable. A pesar de desértico frío de la noche, yo era feliz con mi plato de carapulca.La noche avanzada, el alcohol, la rica comida, en resumen una noche de juerga iqueña memorable y difícil de superar.

Pero luego ocurre una situación inesperada.
Era de día, no había música, bulla ni gente. De pronto estábamos en la sala de la casa jateando sobre unos colchones July, su prima, Patty y yo. Tenía dolor de cabeza, mareo y bastante hambre (para variar). Era evidente que nuevamente había borrado cinta. Felizmente esta vez no tenía motivos para estar preocupado, me había portado bien. Cuando las chicas se despertaron, July y su prima fueron a su cuarto a seguir durmiendo y Patty me acompañó a comprar algo para comer. Para suerte nuestra en el camino encontramos un taxi que nos llevó al hotel. Eran como las 10:30 de la mañana del domingo y estábamos yendo al hotel a descansar de nuestra primera noche en Ica.


El domingo fue un día de recuperación corporal por la destrucción de la noche anterior. Dormí casi todo el día y en la tarde salí a comer algo. En la noche fuimos con Patty a cenar a Huacachina. July estuvo desaparecida todo el día. Regresamos temprano al hotel para descansar y prepararnos al día siguiente. El plan era ir a Cachiche.

El lunes, July seguía desaparecida. Patty y yo seguimos con nuestro plan, almorzamos por la plaza de armas y enrumbamos a Cachiche. No sabía la historia de la palmera de las 7 cabezas, que en realidad tiene 6.
Pero ¿por qué se le llama la palmera de las 7 cabezas si solo tiene 6?. Es que son 6 que no han sido cortadas.


Resulta que hace muchos muchos años hubieron brujas que escapándose de la persecución de la Santa Inquisición española se instalaron en Cachiche que era un caserío alejado de la ciudad y ahí hacían sus conjuros y ceremonias. Pero fueron descubiertas y apresadas. Una bruja llego a escaparse y se escondió en la cima de una palmera (eso cuenta la historia) y al ser descubierta lanzó una maldición a Cachiche en la que si a esa palmera le llegara a crecer una sétima cabeza, ocurriría una terrible inundación en Ica. Para el año 1998 (año del fenómeno del niño) crecía la sétima cabeza a la palmera maldita. El río Ica se desbordó y ocasionó muchos daños a los habitantes. Antes que la inundación llegue a Cachiche, los pobladores decidieron cortar la sétima cabeza y eso evitó que Cachiche sea inundada. Actualmente la palmera debería tener cerca de 12 cabezas, pero solo se ven 6, las otras 6 están cortadas. Curioso ¿no?.

Luego de la parte histórica vino la leída de cartas. El brujo empezó con el floro de rigor y para resumir la historia me dijo que amor no me faltaba, pero que no me dejaba enamorar y que se venía un negocio que me iba a dar mucho poder que debía usar con inteligencia. Finalmente que el año que viene iba a hacer un viaje importante en el que conocería a la mujer con la que iba a querer procrear y tener familia. ¡Plop! En conclusión: vamos a ver si eso sucede.
Regresando a Ica, July llama al celular de Patty y da sus coordenadas, así que enrumbamos a la casa de su familia paterna.

Llegamos y nuevamente el recibimiento con la botellita de plástico con el líquido transparente a medio llenar. Estábamos sus primos, primas y nosotros designados los padrinos del evento. Empezamos con los shots de pisco. Era una Gymkana, tradición familiar de fiestas patrias. Empezamos los padrinos llevando la bandera del Perú al frente de una marcha juerguera con el desfile de los competidores.
Luego el calentamiento de los competidores con una caja de chelas y yo, floreando y queriendo sacar plan con Nana (la más rica de las primas de July, bueno en realidad la menos fea de las primas).

Primera competencia: pasar un hilo por el ojo de una aguja. Primero las chicas; Patty y July, saliendo ganadora Patty. Luego los machos, ahí participamos el primo Gigo y yo, haciéndome ganador de una chela.
Segunda competencia: Llevar un huevo en una cuchara en la boca. Nuevamente primero las chicas. July va en zigzag pero avanzando. Su prima para retrasarla la empuja y la hace caer (el huevo se rompe) así que July coge las sobras del huevo y se las lanza a la prima.
Tercera competencia: El salto del conejito (carrera de saltos con los pies amarrados). July, como siempre tan proactiva, no tenía como amarrar sus tobillos así que sin pensarlo dos veces usó la tira de su brasier para amarrárselos. Y durante las competencias, el primo Gigo les recordaba a sus primas solteras que estaban solteras y que debían conseguir pareja pronto.

Luego otras competencias muy divertidas todas. Nunca antes había tomado cerveza con cuchara y servida en un plato hondo. Es feo tomar así la chela peo fue un empate técnico entre el primo Gigo y yo. En cuanto a la prima Nana, yo ya estaba pasando de un inocente afán a un rochoso acoso.
July no dejaba de advertirme del riesgo de afanar a su prima en presencia del resto de primos: “Huevón, te van a sacar la mie…” pero la advertencia fue demasiado tarde.


Los primos estaban comentando y en su representación, el primo Gigo tomó la palabra entre gritos, brindis y música de fondo habló.

Gigo: “Silencio, silencio….voy a hablar” (voz aguardentosa).

Dirigiéndose a mí dijo:

Gigo: “Tu has venido aquí y estas incitando a nuestras mujeres. Bueno, esto es lo que hay (señalando a sus primas) así que te tienes que conformar con esto. Y si estas interesado en ellas tienes que pagar con algo.”

Voces: “ ¡¡¡ Que se ponga una chela…..noooo que se ponga una caja de chelas !!!”

Más voces: “¡¡¡ Siii, que se ponga una caja de chelas !!!”

(Bulla, gritos, eructos…..pasaba de todo)

Y ya se imaginan, unas 15 personas diciendo en voz alta que debía pagar el derecho de afanar a las "mujeres de la tribu" con una caja de chelas. Y yo, bien cheleado no se me ocurrió mejor idea que responder lo siguiente:
Yo: “Quiero hablar….pido la palabra

Gigo: “Silencio, silencio…..va a hablar”.

Todos se callan y yo me dirijo al primo Gigo y a la multitud que me rodeaba también con voz aguardentosa.

Yo: “Tu me dices que he venido a incitar a sus mujeres y que debo pagar por afanarlas”. (Volteo a mirar a Nana). Pues yo les voy a decir (mirando a la multitud que me rodeaba y a Nana)… que si tengo que pagar una caja de chelas para afanar a sus mujeres…¡¡¡ YO LA PAGO !!!”.

Inmediatamente se escucharon vivas y celebraciones. ¡¡¡Era una fiesta!!!. La alegría de la gente era indescriptible. Yo había dado alegría a la familia de July con mi decisión. Y no por el hecho de estar interesado en afanar a las primas….sino por que iban a tener una caja de chelas para seguir chupando.

En eso se escuchó un comentario de Nana hacia Gigo.

Nana: “Me has cambiado por una caja de chelas, maldito”.

Pero la alegría de la gente no iba a disminuir por nada. Iba a haber más chela y eso era motivo suficiente para estar más que feliz.

En plena algarabía, yo ya era uno primo más. Las tías de July me decían “Salud sobrino”. Le di a “mi primo Gigo” el dinero y al poco rato estábamos nuevamente cheleando. Nunca nos vamos a olvidar Patty, July y yo de ese día de juerga en Ica y menos aun de la frase inmortalizada…YO PAGO!!!.

Luego nos dió hambre y fuimos a comer una hamburguesa. Es difícil contar lo que sucedió después por que borré cinta y tengo recuerdos vagos y escenas que me vienen a la mente. Amanecí el día martes completo en mi habitación del hotel en el centro de Ica.

Finalmente nos embarcamos en Soyus con la satisfacción de haberle sacado el jugo a los días de fiestas patrias con esta juerga que paso a formar parte de un lugar importante en las juergas que hasta ahora hemos vivido juntos…. el team BBAA.